Y el mundo es un macro con muchos micros habitado por y de casualidades. Somos burillas del pañuelo enmierdado y nos conectamos con mocos. Las casualidades, o conexiones, pese a ello, en ocasiones, son simpáticas. Un gris afilado en la mediocridad del mostaza paliducho, o el grito, entre el murmullo molesto de las conversaciones vacías, entre la muchedumbre hacen palpitar. Y cuando pasa las patatas importan una mierda.
hacía bastante que no escribía, la casualidad de ayer me ha animado a hacerlo
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Escucharte era lo mejor de lo peor que podía estar haciendo
en ese momento,
Un momento en el que todo me era irrelevante
En el que las tonalidades mediocres y grises devoraban los
rojos intensos
Mi cabeza no estaba dispuesta a dejarse llevar o a evadirse
como en otras ocasiones
Simplemente pensaba joder, que bien
Pero un joder tan intenso que ni cuchillos, ni mierdas, ni
hostias importaban
Callarte tú y fin de la función
Lo demás me sobraba
No era el efecto de ninguna droga
https://www.youtube.com/watch?v=bXAKwQ4Xvcg